“La casa y la isla”, es la nueva novela de Ronaldo Menéndez, que edita Alianza de Novelas, en la que hace una crónica sobre sus años de juventud en La Habana de los años 80, teniendo como escenario principal a la Escuela Vocacional Vladimir Ilich Lenin, que hasta estos días, es vista como la escuela de élite de la Revolución Cubana, en donde conviven estudiantes excelentes y los que el autor considera como los hijos del jet set del gobierno. En los años de enseñanza, los estudiantes son instruidos de forma sobresaliente, bajo una disciplina militar. Menéndez, dice que la Escuela Lenin le proporcionó una buena educación, pero a su juicio, puede suponer una máquina para destruir personalidades.

Tres de los cuatro protagonistas de esta novela, están en la escuela Lenin. El primero de ellos es el narrador, cuyo nombre también es Ronaldo, junto a sus inaccesibles y bellas compañeras de estudio: Rebeca y Anabela. El cuarto protagonista es el poeta y médico Julio César. El autor, describe a Anabela como una muchacha ingenua, que sabe recitar versos de José Martí a la perfección y piensa que Fidel es un hombre íntegro y puro. Pero es algo que no termina bien, dado que a la final, termina siendo una disidente al descubrir por sus amigos de escuela, que la Revolución cuenta con una ínfima clase alta que vive en palacios con sus botellas de whisky. Por ende, Menéndez habla que en su época, todos empezaron siendo muy leninistas, pero algunas personas terminaron siendo disidentes y que varios de sus compañeros no están en Cuba.

“La casa y la isla”, viene siendo la primera novela cubana que aborda el tema de las clases sociales y Menéndez, asevera que últimamente el cubano percibe que en la isla existen los ricos y por consiguiente, desigualdad, aunque profesa que al respecto no hay un pensamiento crítico, alegando que los cubanos creyeron que todos viven de la misma forma y aún gustan de pensar en ello.